Ay que no llego :-}. Antes que nada, deciros que me disculpéis de ante mano, si el capítulo es un poco extraño o si hay partes que no se entienden, pero es lo máximo que he podido hacer con la fiebre…:-S
Y ahora si, os dejo con el innombrable X*
Capítulo XXXVII – Justificaciones
Edward Pov
-Claro que si, me gusta mucho, es bien bonita, simpática y auténtica…Pues para ellos, TODA PARA ELLOS… - grite frustrado abriéndome paso entre las oscuras calles de Chicago.
Dios, que asco de día… ¿hoy es el día de los santos inocentes y no he visto bien el calendario?, ¿o es que hoy se a compinchado todo el mundo para joderme?… Más bien lo último yo creo. Joder, si lo llego a saber no me levanto de la cama….total, ¿para que?
Decir que hoy no había sido mi día, definitivamente es quedarse muy corto, y el no haber dormido más de una hora la noche anterior, tampoco ayudaba a apaciguarme. Y todo gracias a la inoportuna de mi amiga Alice, no pudo llegar en otro momento no, tuvo que llegar justo en el momento en que me confirmaron que Isabella Swan, volvía a estar en mi clase de historia del periodismo…
Flashback
-¿Interrumpo? – dijo Alice con su voz cantarina, cerrando la puerta de mi apartamento.
-Bueno, como puedes ver estoy completamente solo, así que…no, no molestas en absoluto – conteste mientras dejaba los impresos de mis nuevos alumnos sobre la mesa del salón.
-Estas solo porque quieres ya lo sabes – Alice y sus afirmaciones - ¿Qué es eso? – pregunto curiosa, cogiendo los papeles que instantes antes yacían en mis manos.
-La nueva lista de alumnos. Mañana hay vuelta al trabajo – fingí un nulo entusiasmo mientras me acomodaba en mi amplio sofá.
-Ya empieza a encajar todo – susurro mientras los leía – Me alegro por ella, se merece otra oportunidad.
-Nadie se la quito, ella solita fue la que la echo a perder – afirme. Sabía a leguas de quién estábamos hablando.
-Eres muy injusto con Bella….
-¿Injusto? – interrumpí.
-Si. En todo este tiempo, ¿has sido capaz de ponerte por un momento en su piel? No me contestes, tu cara lo dice todo – siguió sin darme oportunidad a replicar.
-Alice, se marcho con un niño que podía ser mío. Nos dejo a Emmett y a mi tirados, como dos colillas que a nadie le importan. Y encima ¿el malo soy yo?, ¿por qué?, ¿porque no la recibí con los brazos abiertos como hicisteis todos? – pregunte cada vez más molesto.
-Edward nadie le dio un premio por su comportamiento. Obro mal, lo sabe y por eso ha vuelto, para intentar hacer las cosas mejor, pero tú no se lo has puesto muy fácil que digamos – contesto serena.
-Pues que hubiera pensado mejor las cosas antes – susurre algo más tranquilo. Alice tenía el don de tranquilizarme a la par de inquietarme a su antojo.
-¡Anda! – grito risueña - ¿ahora te las das de machito? Te recuerdo Edward, que Bella estaba soltera cuando te conoció. Eres tu el que no se pensó las cosas dos veces antes de bajarse los pantalones – protesto.
-Vale la cague si – para que negar lo evidente, prueba de ello mi soledad de ahora - pero luego le ofrecí mi apoyo, ¿por qué no me conto nunca nada?, ¿por qué cuando fui a hablar con ella no me lo dijo?, ¿por qué tuvo que huir así? – todo hubiera sido tan distinto.
-Por miedo precisamente a esto que tu estas haciendo. La estas juzgando, la estas juzgando cuando ni siquiera Tanya te juzgo a ti – sentenció. Tanya, pobre, nunca se me olvidara el día que le conté lo sucedido. No dejaba de llorar mientras susurraba que era su culpa. Eso al final, acabo por matar lo poco que quedaba de nosotros.
-La habría apoyado, habría estado con ella – murmure mirando al vació.
-No lo parece…
-No es tan fácil, ha hecho mucho daño – calle.
-Tú no dejas que sea fácil. Si Emmett, que es el padre del niño, a sabido perdonarla y entenderla, ¿por qué no eres capaz tu de hacerlo?
-Yo no soy Emmett – proteste levantándome del golpe del sofá.
-Ese es el problema – dijo llamando nuevamente mi atención - Contéstame una pregunta Edward. Si Eliot, fuera hijo tuyo, ¿seguirías tan dolido con Bella?, ¿o es el dolor porque no sea tu hijo el que habla?...
Fin Flashback
Un año, un maldito año me estuve preguntando donde estaría, si estaría bien, si estaría sola, si alguien estaría a su lado, si era niña o niño, si estaba sano…Muchas, muchísimas preguntas me acompañaban día a día y siempre era lo mismo, nadie respondía, nadie sabía donde estaba, era como si se la hubiera tragado la tierra. Un día, tras otro y otro, así hasta trescientos sesenta y cinco.
Y entonces apareció de nuevo, paseando con total tranquilidad mientras mi mente, ciega por el rencor del paso del tiempo, seguía preguntándose donde estaría. La cague, claro que la cague, pero no fui yo quien hablo, fue el dolor, la desesperación por creer que jamás volvería a verla, la angustia por pensar que un hijo, un hijo que podía ser mío estaba creciendo dentro de ella…, y yo no estaba a su lado, no estaba allí para apoyarla.
Tuvo que ser duro, si para nosotros lo fue, para ella, que era quién lo estaba viviendo más. Pero eso no le dio ningún derecho a desaparecer así sin más, a largarse sin dar siquiera una mínima explicación. Puede que mi comportamiento al enterarme de que Emmett había estado también con ella, precipitara su marcha, pero aún así, eso no justifica todo el dolor que nos causo.
Si al menos hubiera dicho donde iba, o hubiera llamado, o respondido a alguno de los cientos de e-mails que le mandamos…, quizás habría sido diferente, o quizás no…, ahora ya, jamás podrá saberse.
De todas formas, estaba claro que ella no estaba dispuesta a hablar conmigo.
Toda la maldita noche estuve dándole vueltas a las palabras de Alice, a su pregunta, esa que volvió a recordarme una vez más, que Eliot, no era mi hijo. Ojala lo hubiera sido. Se que para ella el resultado había sido un alivio, no era para menos después de mi amenaza…, aunque jamás hubiera sido capaz de cumplirla, por mucho daño que Bella me hubiera echo, por mucho rencor que siguiera guardándole en mi corazón, jamás hubiera sido capaz de separarlo de él, al revés, eso habría sido un motivo…, otra oportunidad que me ofrecía la vida para demostrarle mi apoyo, para demostrarle que si podía confiar en mi. Pero nuevamente, el destino volvió a jugarme una mala pasada.
Aún así, Alice tenía razón, la había juzgado cuando ni siquiera Bella lo había echo conmigo. De todos fui el único que no mostro entusiasmo con su llegada, aunque por dentro, me moría de ganas por abrazarla, por volver a aspirar su perfume de fresias, ese que seguía gravado en mi memoria desde aquella fatídica mañana, aquella mañana en la que empezó a caerse la venda de mis ojos.
Además estaba el nudo que se formaba en mi estomago cada vez que Emmett se acercaba a ella. No podía evitarlo, era verlos juntos y mi mente imaginaba sus cuerpos fusionados, el sudor mezclado de ambos, su suave voz susurrando su nombre, igual que hizo conmigo…igual que me hizo a mi… Y jodía, claro que jodía, pero más jodía ver la tristeza reflejada en sus ojos cada vez que nuestras miradas se cruzaban. Tristeza mezclada con incertidumbre, con rencor.
Pero ya no podía hacer nada, ella había echo conmigo lo mismo que yo había echo con ella. Me había negado la oportunidad de explicarme, la oportunidad de darle una justificación a mi comportamiento, al de entonces y al de ahora.
Hacía una horas estaba dispuesto a abrir mi corazón, a contarle todos mis temores, incluso a pedirle perdón por todo el daño que le hubieran podido hacer la fuerza de mis palabras. A dejarla hablar, a escucharla…Pero ella nunca llego a la cita…
Que estúpido eres Edward, debiste imaginarlo por la forma en la que te miraba en clase, esa indiferencia en sus ojos dejaba claro muchas cosas. Pero me deje cegar por esa pequeña esperanza que reflejaban sus ojos, cuando le dije que necesitaba hablar con ella, volví a caer como un maldito estúpido, dejando que los sentimientos de culpabilidad fueran más fuertes que mi propia razón.
Pero si pensaba que el plantón de Bella, era lo peor que podía pasarme, estaba totalmente equivocado…
Flashback
-¿Qué haces aquí? – pregunto una conocida voz.
-He quedado con alguien – respondí encarando a Rosalie.
-Ah…
-No es lo que tu piensas – dije sin pensar. A ella no le debía ninguna explicación, en eso consistía nuestra…relación, pero en cierta forma se lo debía, había sido un punto de apoyo muy importante durante este duro año, no debía sembrarle la duda.
-Sabes que no tienes que darme ninguna explicación – contesto sonriente. Lo sabía, pero mejor si era sincero.
-Y tu, ¿qué haces por aquí? – pregunte tras mirar el reloj de mi muñeca. Bella estaría a punto de llegar.
-Me viene bien pasear por este parque, me ayuda a pensar en…cosas – respondió desviando su mirada de la mía - Te vi y decidí saludarte, ya que hace varios días que no nos vemos – sonrió, pero esa sonrisa no llego a sus ojos. Algo le pasaba.
-Ya, he estado muy centrado en el comienzo de clases.
-No te justifiques. Bueno, me marcho para que estés más tranquilo – dijo mientras yo volvía a mirar el reloj. Estaba demasiado nervioso, no sabía si iba a ser capaz de hablar con normalidad ante Bella.
-No…no hace falta que te vayas – sugerí - por lo menos puedes esperar a saludar a Bella, si quieres, claro – se conocían, no es que fueran las mejores amigas, por lo que podía haber visto estos días pero…, no tenía porque marcharse. Además, yo ya no tenía nada que esconder.
-¿Ella es con quien has quedado? – pregunto en un susurro.
-Si, creo que es el momento de hacer las cosas bien. Por lo menos el momento de dar una justificación a todos mis actos, y por supuesto el momento de escucharla, algo que tenía que haber echo hace tiempo – si, estaba claro que hacía lo correcto.
-Sois unos estúpidos - ¿perdón? - ¿Qué os da esa mujer?...de verdad, sois…patéticos.
-¿Rosalie? – pregunte incrédulo ante su reacción.
-No puedo creer que después de todo el daño que os a echo, caigáis en su juego como si nada hubiera pasado – dije elevando cada vez más la voz - Primero tu hermano, aún aún de él podía esperármelo… ¿pero de ti? – grito - ... ¿donde queda todo eso que me decías? – volvió a protestar, alzando aún más su voz.
-Rose, no…no entiendo tu actitud, sabes de sobra que esta conversación es necesaria…
-Para quién – me interrumpió - ¿Para ti?, ¿para ella?... ¿y donde quedo yo en todo esto Edward?... ¡Dime!, ¿qué vas a hacer cuando ella vuelva a marcharse?, ¿o cuando deje a relucir su verdadera cara?
-Rosalie únicamente quiero aclarar las cosas. Tú mejor que nadie sabes que le dije cosas que no merecía – alce la voz sin querer, me estaba poniendo muy nervioso su comportamiento, comportamiento que no entendía en absoluto. ¿Qué le había echo Bella a ella?
-Una mujer que aleja a su hijo de sus posibles padres merece eso y más – sentencio.
-No puedo creer que tu estés diciendo eso cuando tu… - calle.
-¿Yo que?, no te atrevas a compararme con ella – dijo apuntándome con su dedo índice, no me gustaba nada la Rose que estaba frente a mi - Yo afronte mi situación, fui de frente. Yo se lo que es que te abandonen, se lo mal que se pasa, por eso mismo no puedo creer que seas tan ciego.
-Pasaron cosas muy fuertes entre nosotros – dije exasperado. No podía creerme que le estuviera dando explicaciones a la última persona que me las pediría - cosas que hay que hablar, encima vuelve a ser mi alumna, no puedo estar toda la vida viéndola en clase y luego viéndola en casa de mis padres, y pretender que no ha pasado nada.
-Creía que te tenían prohibido darle clases.
-Ellos nunca se enteraron de que fue Bella. Saben que me acosté con una alumna, pero no saben con quien – era lo mínimo que podía hacer por Bella, después de ser tan irresponsable, lo mereciera ella o no, el que tenía que tener cabeza de los dos era yo, como profesor y como persona sensata…al menos en apariencia.
-Mejor me lo pones – volvió a gritar - Casi pierdes tu empleo, ese que tanto sudor te costo conseguir, y ahora vas a volver a desperdiciarlo todo por una…mejor me callo – hablo por fin en un susurro.
-Si, será mejor – conteste mirando hacían ambos lados, las pocas personas que están por allí, nos miraban sorprendidos, pero yo lo estaba mas que ellos, mucho más que ellos - No te reconozco Rosalie – afirme agachando la cabeza.
-Ni yo a ti Edward – susurro firme - Hazme un favor, borra mi teléfono de tu agenda. A ver a quién llamas cuando vuelva a hacerte daño – dijo antes de darse media vuelta y marcharse por la dirección que había venido. Dejándome allí, totalmente solo y aturdido…
Fin Flashback
No solamente Bella no llego nunca a esa cita, sino que además tuve que lidiar con una irreconocible Rosalie. Su actitud me dejo cao, no me la esperaba, no de ella. Quizás fui un estúpido por pensar que el hecho de haber compartido la experiencia de ser madres solteras terminaría por acercarlas, o al menos, hacer de ese hecho un nexo de unión. Pero me equivoque.
No solo las palabras de Rosalie dejaban claro su pensamiento sobre Bella, sino también sus ojos, ese resentimiento que pude ver reflejado en ellos… ¿por qué?... ¿Qué le había echo Bella a ella? No lo entendía, no cuando durante este año ella jamás fue capaz de hablar mal de Bella, jamás, por mucho que yo le dijera, por muchos reproches que tuviera que escuchar de mis labios hacia Bella, jamás, Rosalie jamás dijo una mala palabra sobre ella. Nada, nunca dijo nada, ni bueno ni malo, simplemente se limito a una posición de imparcialidad. No fue ni juez ni verdugo…, al menos cara a mi, ya si lo pensaba…yo no lo sabía.
Entonces… ¿por qué esto ahora?
No creo que…estuviera ¿celosa?… No, no puede ser Edward, entre ella y tu siempre a estado todo muy claro, demasiado claro. Fuimos amigos sin más hasta que un día los hechos fueron más allá. Recuerdo sus palabras antes de darnos ese primer beso “esto no tiene porque cambiar nuestra relación”, y así fue, así lo habíamos acordado. Nuestra relación no era más que una unión por necesidad, una unión sin compromiso, sin remordimientos. Mutuo interés sin sentimientos de por medio, simplemente dos personas saciando sus instintos naturales mas bajos, nada más.
Pero entonces ¿por qué de esa actitud?, ¿porque ese comportamiento tan repentino?...Dios Edward…vas a volverte loco como sigas por este camino.
Y eso que hoy iba a ser un buen día. Si, eso me dije en la mañana mientras tomaba mi café en la soledad de mi cocina. Eso me repetí justo antes de entrar al aula donde sabía que ella estaba. Y volví a hacerlo antes de llamarla al final de la clase, y justo cuando caminaba hacia el lugar donde habíamos quedado… Y ahora aquí estoy, vagando por las calles de Chicago, a las dos de la mañana y sin ningún taxi a la vista.
Vaya asco de día. Lo peor de todo es que pensaba que la salida con los chicos calmaría mi ansiedad, esa que sentía por no haber podido hablar con Bella, esa que me atormentaba por pensar que había perdido a una amiga, sin entender aún muy bien las razones, y por ende, a Emma, su hija, la niña que había conseguido trasmitirme algo de paz, paz que estaba sin encontrar hacia ya tantos meses…
Pero no, no había conseguido absolutamente nada de eso, al contrario, había conseguido que mi ansiedad fuera a más, porque era evidente que hoy todo el mundo estaba en mi contra. Sino porque los chicos pasaron de hablar de futbol a hablar de Bella… No podían hablar de otras mujeres no, con todas las que hay en este mundo tuvieron que hablar de ella, y no precisamente cosas como…”que buena madre es”, o, “que ansias de superación tiene, es una valiente”, no…eso para ellos era secundario.
Para ellos era más importante hablar de lo buena que estaba, lo guapa que era, o las mil y una citas que Jacob quería tener con ella…
Dios…Bella, Bella, siempre Bella…, es que no podía simplemente desaparecer de mi mente. No era ya bastaste jodido tenerla gravada en mis pensamientos, que encima todo el mundo tenía que repetirme su nombre. No y lo peor vendría después. Era evidente que Jake sentía una atracción por ella, y según sus palabras, parecía compartido…
Manda narices, yo esperándola en el parque como un imbécil y ella….ella pasándoselo de lo lindo con mi amigo, igual que había estado haciendo durante todo este año, pasando de mí y de todo. Y encima, mañana tendría que verla nuevamente en clase, y así día tras día soportando su desinterés hacía mí.
¿Dónde quedaba yo en todo esto? ¿Dónde quedaban todas las palabras que aún tenía que decirle?... Esta claro Edward, en ninguna parte, porque ese es el interés que tiene en ti…Ninguno.
Pues iba lista si pensaba que iba a quedarme callado hasta que a ella le apeteciera hablar conmigo. No, le diría todo lo que tenia dentro de mí, todo lo guardado durante estos meses y ya después, después si quería seguir ignorándome que lo hiciera, pero hoy, no dormiría con todo esto que llevo dentro…
No se que pudo más, si mi rencor acumulado durante todos estos días, si su negación a hablar conmigo junto a su plantón en el parque, si fueron los comentarios de los chicos, esos que la adulaban como si de una gran diosa se tratara, o si fue el fuerte alcohol que seguía corriendo por mis venas, el que me impulso a ir hasta su apartamento.
Por Alice me entere que vivía en el mismo edificio que ellos, así que no tuve ningún problema para llegar hasta el, pues conocía muy bien la calle, y gracias a que la puerta del edificio estaba entre abierta, no tuve ningún impedimento para entrar en este, y acceder por las escaleras hasta la segunda planta.
No me lo pensé dos veces, una vez estuve delante de la oscura puerta de madera. Una, dos, tres veces…así hasta que la abriera…
-Voy voy…un segundo – escuche su voz desde dentro – como seas tu Andrew, juro que te mato – dijo ya cada vez más cerca - ¿Por qué no te has llevado las?….llaves… ¿Qué haces tu aquí? – pregunto sorprendida al verme, llevando sus manos a su bata blanca, en un gesto que cubrió aún más su cuerpo, ese cuerpo que hacia poco más de un año se estremecía entre mis manos.
-Necesito hablar contigo – susurre en voz baja pero firme, tragándome mi propia saliva ante su perfecta imagen.
-A las… ¿dos y media de la mañana?...
-Bueno, es que me he cansado de estar esperándote en el parque – dije sarcástico, alzando más la voz.
-Edward…mañana será otro día – respondió tras un gesto pensativo, justo antes de intentar cerrarme la puerta en las narices.
-¡No, mañana no! – grite – Llevo un año esperando hablar contigo, y no pienso marcharme hasta no decirte lo que tanto tiempo llevo aquí dentro – gesticule con mis manos.
-Vas a despertar a todo el edificio…
-¡Me da lo mismo! – volví a gritar.
-Quieres calmarte por favor – rogo.
-¿Ahora si te da vergüenza que me escuchen? ¡Hace un año cuando te largaste de esa forma no te dio ninguna!
-¿Quieres hablar?, muy bien, habla, pero aquí dentro – contesto agarrándome por la camiseta, e introduciéndome dentro de su apartamento.
-¿Por qué?
-¿Por qué que?
-¿Por qué te largaste? – reproche - ¿Por qué te largaste sin dar una maldita explicación?, ¿por qué te niegas a dármelas ahora? – grite cada vez más.
-Tengo un niño de cuatro meses durmiendo ahí dentro, te pido por favor, ya que has venido hasta aquí como si tuvieras algún derecho, que bajes la voz o….
-¿O que? – la interrumpí.
-¿Quién te crees que eres para pedirme explicaciones? – pregunto colocando sus brazos en jarras, dándome una perfecta visión de su pálida y exquisita piel.
-¿No puedo pedirlas? – pregunte volviendo a centrarme en sus ojos - Te quedas embarazada, te largas sin dar ninguna razón consistente, desapareces durante un año de nuestras vidas como si nunca hubieras formado parte de ellas y a todo esto hay que sumarle el hecho de que yo podría haber sido el padre de la criatura, pero aun así… ¿no tengo derecho a pedir una mínima explicación? – exigí.
-Tú no eres el padre. Fin
-Anda, y con eso se arregla todo, como yo no soy el padre, no tengo derecho a escuchar la explicación que le has dado a todos.
-La sabrías si hubieras querido escucharme. Vine dispuesta a hablar contigo pero tu solito te has ganado a pulso que no tenga que darte ninguna justificación.
-¿No?
-¡No! – grito - Es más, en todo caso eres tu quien tendría que dármelas y no he pedido nada.
-Te las habría dado si al menos me hubieras dado la oportunidad.
-Edward y sus oportunidades – dijo en tono de burla.
-Si, hoy, hoy mismo te pedí por favor hablar contigo. Te estuve esperando en el parque y no apareciste, ni un mensaje, ni un…no voy a poder ir, nada... ¡Nada!
-Vas a despertar a Eliot… - hablo entre dientes.
-¿Pero donde estaba Bella? – pero yo ya estaba perdido por mis impulsos - pues haciendo lo que más le gusta, llamando la atención del resto del mundo, dando de lado a las personas que se preocupan por ella.
-Shuuuu
-¡No me callo! Que pasa, ¿Jacob es mejor que yo?, ¿el si es merecedor de tu compañía?, ¡¿él si es digno de estar a tu lado?!
-Joder…ya lo has conseguido… - grito antes de darse media vuelta y perderse por el pasillo del apartamento.
Mierda Edward…otra vez la has cagado y esta vez de verdad. Joder, ¿qué mierda te esta pasando?...
No se como tuve el valor suficiente de seguir permaneciendo en esa casa, no cuando había despertado a su hijo, al hijo que creí por un momento mío. No cuando había ido hasta su casa, pasadas las dos de la mañana, creyéndome con algún privilegio de reclamarle nada…No cuando la vergüenza se paseaba a sus anchas por todo mi cuerpo.
Dude dos veces en marcharme, pero sabía que si lo hacía sería peor. Si mi error podía tener algún arreglo, era ahora…
Tembloroso y avergonzado, camine por el pasillo hasta el interior de la casa. Su dulce voz me guiaba hasta donde estaba, voz que se intensifico una vez estuve cerca del cuarto del niño. Hay estaba Bella, cantándole una nana a su hijo, a la única persona a la que si le debía alguna explicación…
Yo no tenía ningún derecho de estar allí…
-Bella – susurre avergonzado desde el marco de la puerta de la habitación – Escucha… lo sien….
-No, escúchame tú un momento – dijo alzándose para encararme - No eres nadie para presentarte en mi casa a las dos de la mañana – sonó serena - No eres nadie para despertar a mi hijo – siguió - Y no eres nadie, para reclamarme absolutamente nada. Y ahora, si me disculpa profesor Cullen, le pido que por favor se marche de aquí y no vuelva nunca más – termino diciendo, con una frialdad desconocida en sus ojos.
-Bella…
-Márchese – pidió - Y por favor le rogaría que nunca más vuelva a llamarme Bella, ni a acercarse a mi sino es para hablar sobre la asignatura o hacerme alguna pregunta referente a su sobrino – dolió, esa indiferencia dolió…
Pero me la merecía…
Bueno, ahora Almu corre a esconderse en las profundidades de su cueva, pero en mi defensa diré, que Edward no se merece tenerlo nada fácil :-S
Nada, el miércoles más con Alba….Besos!!!!
08/10/2010 Nuri
11/10/2010 Ayyys
13/10/2010 Karla
15/10/2010 May
18/10/2010 Almu
20/10/2010 Al
22/10/2010 Airam
25/10/2010 Milu
7 Sonrisas:
Hola Almu, es la primera ves que me atrevo a escribir y tengo el honor de ser la primera. Mi nombre es Micaela. Que pedazo de capitulo este eh, tienes razon sobre Edward. La verdad que me encanta como escribes. Saludos !
PD: No te olvides de My angel por favor extraño a Rob y Kris :(
ODIO TENER QUE DECIR ESTO DE ED PERO ¡QUE PELOTUDOOOOOOOOOOO! ME ENERVA ESE TIPO, QUE EGOISTA POR FAVOR, CLARO QUE ESTA HORMONADA BELLA TAMPOCO ES UNA MARTIR PERO SE LA BANCO SOLITA Y PONE A SU HIJO DELANTE COMO DEBE SER. ROSE, BUENO...ES ROSE, DEJEMOSLO AHI.ALMU ME ENCANTO DE VERDAD PUDISTE SUMERGIRTE BIEN PROFUNDO EN LA MENTE DE UN HOMBRE ( AUNQUE SOLO SEA DE DOS CM MAXIMO TAL PROFUNDIDAD)EL EGOCENTRISMO DE NUESTRO BELLO ED QUEDO MUY BIEN PLASMADO. AHORA QUISIERA HACER UN LLAMADO A LA SOLIDARIDAD DE LAS TALENTOSISIMAS ESCRITORAS DE DISTURBIA : POR FAVOR " NO HAGAN QUE UNA ENCAMADA SOLUCIONE COSAS PLIS!!!!!. BUENO ES SOLO UNA EXPRESION DE DESEO, SI LOS EMPIERNAN IGUAL LO LEERE CON AVIDEZ. BESOS A TODO EL MUNDO
P/D: MEJORATE PRONTO ALMU!!! TKM BESO
Almu!!!!!!!! antes de comentar el capitulo voy a decir porque me gusta disturbia mira no porque participo enla historia si.. si... se parece una telenovela ;-D pero mira que la realidad supera a la ficcion... cuantas veces no he visto a chicas que en una noche de amor o como le quieras poner y no toman precaucion ninguno de los dos y chinnn salen enbarazadas y dejan sus estudios y ahi se quedan dejando pasar la vida... pues eso que me gusta por eso Bella ha decidido salir adelante y quien dijo que la tenia facil y mira que yo tengo un niño pequeño y no es facil ... me gusta Disturbia!!! uniko jeje.
Ahora si....despues de mi intento de reflexion... que me ha gustado como lo has manejado y decifrado la mente de ED mira creo que lo entiendo un poco me cai mal en los capitulos anteriores ahora me da pena!!! por El claro sus actitudes no son buenas pero El tambien ha sufrido y no se da cuentas de las cosas por estar sumergido en su propio dolor y eso hace que vaya de un error tras otro.
me gusto mucho la discucion que tuvieron Rose y El , me encanto Rose no entiende nada!! esta super celosa!!! y Edward viceversa no entiende la actitud de Ella.
como lo pueden exasperar los chicos y mas Jacob picandole la cresta!!! haber si despierta!! pero mira lo que lo llevo hacer ... ir al departamento de Bella para hablar porque no podia esperar... mira que tambien lo entiendo yo tambien soy asi de desesperada no me gusta dejar las cosas para mañana y eso nos hace cometer muchos errores ... es mejor estar tranquilos para poder hablar y que no nos gane el coraje porque ayyyy decimos muchas estupideces!!
genial Almu!!!! me encanto de verdad que siii todo lo que escribes te lo compro.
y recuperate cariño!!! que mira que tienes que estar bien para los dias que te esperan algo se un pajarito me conto jejej ya ves que aqui no enteramos de cosas. besitos y muchos abrazos!!!! ahh y gracias por tu comentario! mira que tengo buenas maestras!!!
ALMU.. ANTES QUE ANDA ESPERO TE MEJORES PRONTO N ABRAZITO JEJE.. Y BUENO TREMENDO CAPITULO... ME FASCINO PORQUE BUENO ASI CONOCEMOS QUE TANTO PIENSA EDWARD DE TODO LO QUE HA PASADO ESTO FUE MAS PROFUNDO... Y CLARO QUE ME ENOJE CON EL PUFF. COMO SE ATREVE A RECLAMARLE TAN RAPIDO JAJA BUENO BUENO TIENE RAZONES .. PERO NO JUSTIFICA QUE BELLA CAIGA TAN RAPIDOOO.. ME DIO UN POCO DE PENA PORQUE LO TRATO CON INDIFERENCIA JAJA PEROOO ES NECESARIA POR EL MOMENTO.. ME ENCANTO ALMU.. YO NO ENCONTRE INCOHERENCIAS JAJA ASI QUE ESTAS SALVADA JAJAJAJA......... MUY BIENNNN :D ;-D ... Y CON GRIS COMPARTO TU OPINION :p .. BESOS A TODAS CHICAS
que he leido mi comentario y las cantidades de mira... que te puse jeje ahora tengo que mejorar en mis comentarios.. nooo puede ser no doy con una jajjaja si te digo que soy una desesperada y no checo lo que escribo en fin asi quedo no te rias please jeje bueno me voy! adiosito!!
Bienvenida Micaela!!!!.
Muchas gracias chicas por preocuparos por mi salud, hay ando :-S, poco a poco...Yo también apoyo a lo dicho por Gris, bueno, en vista a lo que escribí, es un poco evidente X*
Vosotras dos, si si, May y Grisel....anda que si, confabulando ¿eh? :-}...Jooo, yo también quiero saber ese final :-[ contarmeeeee, que estoy enfermaaaa!!!!
Y tú, ¿nos regalas una sonrisa?