Geraldine, Miluska, May, Airam, Karla, Dana, Erin, Ayyys…, ni os imagináis lo feliz que me habéis echo con vuestras palabras :-}, GRACIAS!!!!, y no pedirme más disculpas..., no estáis obligadas, ya lo sabéis ;-)
Aquí esta la continuación del capitulo, a partir de ahora creo que hare esto, es decir, el capitulo lo corto por la mitad, y así actualizo dos veces por semana, de esa forma también esperáis menos para leer ;-)
Dudas y preguntas :-}
Mi intención es narrar la historia desde el punto de vista de los dos, pues, como veis, ahora mismo poco sabemos de Edward y detrás de él hay mucho, pero, como quiero centrarme bien en la personalidad de Bella y no estar repitiendo lo mismo en dos capítulos, pues pensé primero desarrollar la historia desde un punto de vista, y luego desde el otro, siempre y cuando así lo quisierais vosotras, así que si, mi intención es hacer lo mismo que estoy haciendo ahora mismo con Bella, también con Edward, pero eso será, a su debido momento :-}
¿Los hombres como super Edward existen?... a ver si preguntáis lo mismo dentro de unos capítulos XD
Capítulo 11 – Perder el juicio
-¿Edward? – pregunte tras tocar levemente la puerta, con temor a lo que pudiera esperarme dentro.
-¡Pasa! – le oí gritar.
Va Bella, gira la manivela de la puerta, no hay un ogro ahí dentro… No…un ogro no, pero un lobo con piel de cordero, si…
Esta bien, vamos…
Ligeramente temblorosa, lleve mi mano hasta el pomo, a la vez que aprisionaba mi labio inferior entre mis dientes. Otra en mi lugar seguramente estaría disfrutando con la situación, y por supuesto, deseando encontrar su imagen desnuda tras la puerta, pero yo… no. Yo no soy de ese tipo de chicas, y no porque no quiera, ojala pudiera pero… la vergüenza, la vergüenza puede más que yo. ¡Dios!, si apenas soy capaz de decir algo coherente cuando lo tengo cerca, no quiero ni imaginar que sería de mi si me lo encontrara en esa situación…
Todavía no había traspasado el umbral de la puerta, cuando el ruido de agua me alerto de que seguramente estaba en la ducha. Normal Bella, si te ha pedido una toalla, es porque se esta duchando hija…
(os la pongo para que recordéis como era el baño)
Exhale todo el aire contenido en mis pulmones, una vez corrobore que estaba en el interior de la ducha, y no en la bañera como perfectamente podría haber estado gracias a las maravillosas ideas de mi madre, esas que la llevan a meter en un mismo cuarto de baño, una ducha y una bañera. La pobre mujer, que no se decidía, así que prefirió poner las dos, por si alguien quería utilizarlas simultáneamente… Ay Bella, que no te enteras.
Dejando atrás mis estúpidas conclusiones, comencé a caminar sobre el frio suelo, avanzando hasta el mueble que estaba pegado a la cristalera de la ducha, sobre este, yacían perfectamente doblados, sus pantalones junto a unos slips color negro. Me sorprendí a mi misma mirando embobada ambas prendas, no porque fueran de él, sino por como estaban colocadas, minuciosamente dobladas, una sobre la otra, y no por el suelo desperdigadas como fácilmente haría yo.
Gire mi cabeza hacía el sonido del agua, y agradecí que la hilera de azulejos que me separaran de su cuerpo desnudo, estuviera allí, aunque a la vez, sentí una extraña sensación recorrer todo mi cuerpo, algo que no sabía bien como describir, algo que no me permitía dejar la toalla sobre el mueble y marcharme de allí. Era la misma maldita sensación que llevaba sintiendo desde la tarde, desde el momento en que abrocho mi cremallera, hasta el momento en el que vi como su imagen se perdía tras la puerta de este mismo baño.
¿Y si me asomo solo un poquito?, no es pecado querer ver, además, eso no significa nada, no tiene porque pasarme nada por ver algo de carne ¿no?
¡Mierda de hormonas!… Venga Bella, haz lo que has venido a hacer y sal de aquí, antes de que sea demasiado tarde.
-Gracias – salte ante la voz de Edward.
Ahí estaba él, la viva imagen de una obra de arte, y eso que solo era su rostro y parte de su brazo, los que se dejaban ver a través de los empañados cristales.
Joder, si ya de normal era guapo…, con la cara completamente humedecida, ese pelo indomable, totalmente empapado peinado hacía tras y las gotas de agua paseando con total libertad por la piel de su brazo, perdiéndose por sitios que no era capaz de ver… No, sin duda esta imagen era aún mejor de aquella a la que estaba acostumbrada.
-Aquí…, aquí dejo la toalla – me obligue a decir, sin poder apartar mis ojos de la imagen que me estaba ofreciendo.
Y por un momento desee poder ser una de las gotas de agua que recorrían su rostro, por ejemplo esa que ahora mismo estaba mirando embelesada, pasearse lentamente desde su frente, pasando por su suave pómulo, hasta llegar a sus carnosos e humedecidos labios y perderse por la abertura de estos…
Joder Bella, vas a terminar muy mal si sigues así… muy, muy mal.
-¿Qué? – pregunte a Edward, pues si fija mirada acompañada de su letal sonrisa estaban empezando a desconcertarme.
-Te sonrojas con mucha facilidad – contesto sin borrar esa expresión de su rostro. Y yo, como no podía ser de otra forma, me sonroje más, provocando con ello que sus risas fueran más audibles.
-¿Por qué…, porque me haces esto? – pregunte una vez fui capaz de reaccionar.
Llegados a este punto, hasta un niño de dos años se daría cuenta de las reacciones que Edward estaba empezando a provocar en mi cuerpo y mente.
-¿Qué te hago? – pregunto junto a una mueca de curiosidad.
-Esto…, todo esto – gesticule con mis manos – te pasas el día probándome – susurre sin dejar de mirarlo. Quería dejar de hacerlo pero…, no podía, esa extraña sensación de mi cuerpo…, no me dejaba hacerlo.
-Solo hago mi trabajo Bella – musito algo más serio.
-¿Tu trabajo?... ¿Y en que parte del acuerdo esta que te pases el día provocándome? – inquirí.
-¿Yo te provoco? – pregunto sorprendido.
Y todo porque no fui capaz de callarme y largarme de allí. No, yo tuve que preguntar. Pero es que… joder, yo nunca he visto cosas donde no las había, yo siempre he sabido muy bien las cosas, y esto que estaba haciendo conmigo, no era más que provocarme, ¿por qué?, eso mismo es lo que quiera saber.
-Si…, el numerito del espejo, tus caricias, eso que has hecho hace diez minutos ahí fuera cuando has estado apunto de besarme, el pedirme que ahora te traiga una toalla…Tu…, te pasas el día torturándome – concluí sin apenas voz.
-Te provocaría si te pidiera que entraras conmigo a la ducha, pedirte que me traigas una toalla mientras yo estoy aquí dentro, es simplemente no querer mojar el suelo al salir – susurro. Si… ¿y lo de antes que? - Y lo de ahí fuera – siguió como si hubiera sido capaz de leer mi mente - es un ensayo de lo que hay que hacer mañana, como todo lo de hoy, fingir ante todo el mundo para que no vean una realidad – Vale, dicho así…parece que sea una paranoica pero… un momento…
-¿Qué realidad? – pregunte abriendo mis ojos en demasía.
-Que sigues colada por tu ex y por eso no has sido capaz de tener una vida desde que te dejo – respondió serio…
-¿Cómo? – grite sobresaltada.
-Lo que oyes, y si no, ¿porque estoy aquí? – pe…pero... - Y lo del espejo, no era más que amabilidad, intentaba abrirte los ojos Bella, hay todo un mundo ahí fuera, y te lo estas perdiendo por absurdos complejos – concluyo antes de volver a perderse en el interior de la ducha.
Ah no, no puede decirme todo eso que me ha dicho y seguir duchándose sin más.
-¡Yo no soy una acomplejada! – grite con total intención de que me oyera.
-Si, si lo eres, y una reprimida – ¿reprimida?... Será gilipollas - estoy seguro que si ahora mismo saliera de aquí, cerrarías los ojos y te largarías – gritaba desde el interior – Deja de vivir en el maldito pasado de una vez, y disfruta un poco mas, no te vendría mal.
Y así es como se cae el mito del hombre perfecto, y éste pasa a ser el perfecto gilipollas, ¿pero quien era este tío para decirme lo que me estaba diciendo?
-¡Tu no me conoces nada para decir eso de mi! – dije totalmente indignada.
Alucinante como la rabia había pasado a sustituir a esa extraña sensación que hacia nada, estaba recorriendo mi cuerpo.
-Pues fíjate, lo poco que te conozco me ha dado tiempo a constatar lo que digo – dijo a la vez que deje de escuchar el sonido del agua – ¿Te importaría pasarme la toalla? – pidió. Encima…
Y entonces cometí la mayor gilipollez, caer en su juego.
-¿No soy una reprimida?, sal tu a por ella si la quieres – dije apoyando mi espalda sobre el mueble a la vez que me cruzaba de brazos.
Eso Bella… es madurez… ¡Oh… Cállate!
-¿Para que luego me acuses de provocarte?, no gracias.
-Pues te quedas sin toalla – respondió mientras la indignación iba recorriendo mis venas…
-Señor…
-¿Quién es ahora el reprimido Edward? – canturreé.
-Muy bien…
¡Mi madre!
-Que, ¿no era esto lo que querías? – pregunto parándose frente a mi, mientras yo llevaba mis dos manos hasta mis ojos.
No has visto nada Bella, no has visto absolutamente nada nena…
-¿Cuanto llevas sin ver a un hombre desnudo? – susurro mientras sentía como se acercaba a mi.
-Eso no te importa – susurre girando mi cabeza en un intento de no mirarle a la vez que pegaba mi espalda todavía más, contra la repisa del lavabo.
¡Señor!, porque he tenido que decir nada…
-Ves, ¿ahora quieres huir? – pregunto colocándose justo en frente de mi.
-Déjame salir – pedí en un susurro, sin llegar a mirarle todavía, cuando apoyo su brazo en el lateral del estante, haciendo barrera para que yo no pasara.
Bella…, esto te pasa por lo que te pasa…
-Entonces no vuelvas a decir que te provoco – respondió apartando su brazo de la repisa, a la vez que lo sentí alejarse un poco de mi, para colocarse la toalla alrededor de su cintura.
¿Tenía razón?..., ¿era tal el daño que Jasper me había echo que me había convertido en una reprimida?
-No soy una reprimida – gimotee en susurros clavando mi mirada en su rostro, por el cual aun seguían brotando restos de agua.
-Siento si te he ofendido…, no era mi intención – susurro penetrándome con su mirada a la vez que alzaba una de sus manos para acariciar con sus dedos mi mejilla.
Y otra vez la maldita extraña sensación, comenzó a recorrer mi cuerpo, haciendo que con ello olvidara cualquier resto de rabia.
-No quiero ser una reprimida – volví a susurrar, llevando mi mano hasta la suya.
Sin saber aún muy bien como, mi otra mano reacciono por instinto, y agarrando el brazo libre de Edward, estire de él hasta pegar su cuerpo al mío. No lo pensé dos veces cuando estampe mis labios contra los suyos, los cuales parecían estar petrificados pero tras unos segundos, comenzaron a corresponderme a la vez que sus manos, se soltaron de mi agarre y fueron a parar a mis caderas, las cuales apretó contra las suyas.
Jadee en su boca al sentir cierta parte de su cuerpo, la cual parecía comenzar a tener vida propia, clavándose sobre mi vientre, aún así, no fui realmente consciente de lo que estaba sucediendo, hasta que no sentí las manos de Edward apretando mi trasero.
Pero realmente, ¿importaba algo lo que estaba haciendo? Vale, estaba estampada contra el lavabo de uno de los muchos cuartos de baño de la casa de mis padres, un desconocido, al cual había pagado nueve mil dólares para que me acompañara, me tenía presionada entre su cuerpo y dicho mueble, pero… sinceramente ¿importa algo eso cuando se ha perdido el juicio? No, definitivamente eso no importa nada cuando el argumento de esa perdida de la razón, envolvía su lengua con la mía en una danza desconocida hasta hoy para mi, importaba bien poco cuando solo el contacto de sus manos en mi piel, hacían que por esta recorriera una extraña sensación, una sensación jamás vivida hasta este momento, una… que me estaba haciendo sentir más viva que nunca.
Pero si creía que solo esto bastaba para perder el juicio, es que no había sentido las manos de Edward perderse por el interior de mi vestido, avanzando sin ningún tipo de delicadeza por mis piernas, hasta llegar nuevamente a mi trasero, el cual apretujo entre sus dedos, pegándome más contra él, justo antes de dejar de sentir el suelo bajo mis pies, acabando así sentada sobre el mármol del lavabo.
Sentí su húmedo pecho desnudo apretándose contra el mío, a la misma vez, que su miembro lo hizo contra mí sexo, el cual note humedecerse aún más, a medida que apretaba sus caderas contra mí, haciéndome jadear sonoramente, provocando que los labios de Edward se separaran escasos milímetros de los míos.
Ni abrí los ojos en busca nuevamente de estos, no hacía falta, su cálido aliento, ese que exhalaba con fuerza sobre mi rostro, me indicaron que estaban cerca, y llevando mis casi hasta ahora paralizadas manos a su cuello, volví a atraerlo a mi, para ser yo ahora, la que introdujera mi lengua en busca de la suya.
Podía oler mi excitación, mezclada con el suave aroma del jabón con el que había bañado su cuerpo, podía sentir como mi piel se erizaba a medida que sus dedos paseaban por esta, pude sentir el nudo que se formo en mi estomago, a la vez que sus manos se colocaron en mi espalda, comenzando a bajar la cremallera que él mismo había subido horas antes. Pero sin duda alguna, lo que más pude sentir fue la duda que me embargo por completo, cuando mis manos temblorosas, comenzaron a descender por la tersa piel de sus vigorosos brazos…
Conciencia…habla por dios, di algo, aunque sea que esto esta bien, lo que sea pero di algo…
Nada, esa fue la respuesta que encontré de ésta, absolutamente nada, y entonces…, fue cuando entre en pánico, porque sencillamente Edward tenía razón…, no era más que una reprimida, una reprimida que no era capaz de terminar lo que yo misma había empezado.
-Bella…esto no… - susurro Edward, una vez sintió como me paralizaba bajo sus brazos.
-Perdona… no se… no se – susurre incapaz de mirarle a la cara, e incapaz de poder soltarle.
Quería seguir, joder… claro que quería seguir pero…, estaba aterrada…, sin más, estaba cagada de miedo.
-No, perdóname tu a mi – dijo antes de deshacerse de mi agarre y alejarse de mi, dejándome totalmente vacía.
Y en ese momento, hice lo único que me creía capaz de hacer, huir, salir corriendo de ese baño, dejando atrás a aquel capaz de hacerme perder el juicio de todo.
-¡Dios! – grite una vez llegue hasta mi propio aseo.
¿Qué coño ha pasado? ¿Qué narices a sido eso Bella?....
No se…, no se Quizás fueran sus palabras, o quizás, mi rabia interna por saber de la realidad de estas, las que me llevaron a tener tal iniciativa, una desconocida en mi, una que quería que siguiera formando parte de mi, pues si en verdad las palabras de Edward eran ciertas, quería dejar de ser eso que me había dicho que era, eso mismo que había demostrado ser cuando el pánico comenzó a mezclarse con la adrenalina que corría por mis venas…
Pero la había cagado, o simplemente mi duda había causado la misma sensación en él, haciendo que fuera Edward quien finalmente acabara rechazándome a mi…
Joder Bella, para una maldita vez que te lanzas, y vas y la cagas…. Dios….
Ni me pare a contestar a mi propia mente, no estaba para tonterías, no cuando por primera vez en mucho tiempo, mi mente y mi cuerpo estaban conectados en una misma cosa, las sensaciones provocadas en mí por lo que acaba de ocurrir.
Me deshice del vestido mientras el agua llenaba el espacio de mi bañera. Ni siquiera me espere a que esta se completara cuando me sumergí en ella, a la vez que las imágenes, comenzaron a llenar mi más que aturdida mente.
Lleve mi mano hasta el centro de mi pecho, el cual seguía totalmente acelerado, y comencé a deslizar mi mano en un intento de tranquilizarme, pero conseguí justo el efecto contrario. Completamente el contrario.
Por un momento desee que fuera su mano y no la mía la que me estuviera acariciando, la que estuviera dibujando formas por mi pecho, la que consiguiera erizarme por completo a medida que iba descendiendo a través de mi vientre. Desee internamente que fueran sus dedos los que se aventuraran a conocer el foco de mi excitación, esos largos y varoniles dedos, los que se entretuvieran jugando con los pliegues de mi agitación, a la vez que su otra mano se entretenía en acariciar mis piernas.
Y entonces me deje llevar por el deseo e imagine que era su miembro, ese que pude sentir cuando la claridad no formaba parte de mí, el que se introducía en mi interior. Imagine que su cálido aliento, ese que había sentido brotar por mi rostro, estaba ahora cerca de mi oído, jadeando palabras incomprensibles de igual forma que yo estaba haciendo.
Y desee que él fuera el causante de mi orgasmo, el causante de hacerme perder el juicio, no solo en pensamiento, sino en realidad…
No hay peor cosa para el orgullo de una mujer, que venga un hombre y nos diga lo que nos negamos a escuchar:-S. Ay Bella, Bella…, como ha dicho ayyys, tu vas a cumplir al pie de la letra todas las leyes de Murphy…, pues esto no es nada comparado con lo que te queda aún, de eso me encargare yo :*)
Nos leemos durante el fin de, besos!!!
7 Sonrisas:
Ahora que voy al día en los comentarios no me pienso descolgar! ;-)
Pobreta mi Bella, se acaba de dar cuenta de muchas cosas... y es que como tu dices, no hay más ciego que el que no quiere ver. La pobre se niega a abrir los ojos, pero parece que Edward es un buen "pepito grillo", con unas técnicas diferentes, pero... jajajaja
Tu crees que si Bella le da un silbidito (como en la peli de Disney) Edward irá corriendo a cubrir necesidades? XD Es que me parece a mi que este Edward al fin y al cabo está haciendo su trabajo... no se yo. Ya veremos...
Y bueno, en cuanto a las chungas...pensaba que solamente era yo que andaba demasiado liada y desconectada, pero veo que es general! :-( Igual me uno a tu plataforma May. Dime donde me apunto!
Pues nada, gracias por la felicitación de las velitas... aquí hoy andamos del festivo de la Conchi (La Inmaculada Concepción). Vamos, fiesta que es lo que importa!
Nos leemos!
ALMU!!!!!!!!!! lo que acabo de leer es muy excitante barbara!!! digo lo que es.. me has hecho sentir mejor me callo XD.... mi Bella la mandaste apunto de ebullicion lo cual no aguanto y se desahogo quien no :-} y super Edward se habra desahogado?? mira las cosas que me haces decir pero tu tienes la culpa por escribir de esa manera tan real!! eres buenisima!! y se me agotan las palabras.
mi ayyys aqui tambien andamos de fiesta desde el domingo igual, por la Inmaculada Concepcion tipicas fiestas del pueblo!! que mas al rato me voy para alla y festejar por la noche!
muchos besitos para todas!!!
Almu: estuvo genial el capitulo hasta me dio un poco de calor, me parecio que Edward estuvo un poquitin desubicado con todo lo que le dijo a Bella, no porque fuera mentira sino por que recien la conoce, pero parece que la conoce mejor de lo que lo hace ella.
Me mato el final, lastima que no fue con el.
En cuanto a tu pregunta sobre el punto de vista de Edward, me encantaria leerlo, no importa como lo quieras escribir, la decision es tuya ya que es tu historia. Mas de una vez me pregunto que sera lo que el piensa, que lo llevo a ese trabajo, como lo afecta Bella a el, etc,etc,etc.
En fin agradesco que actualices tan rapido, la modalidad de capitulos cortos dos veces por semana es muy buena. No dejes de escribir lo que te hace feliz, claro que a tu propio ritmo. Besos desde argentina con amor.
:-}
barbaro barbaro. barbarisimooooo que capitulo eh... bueno se k digo siempre eso.. pero es k todos son geniales.. sabes lo muxo k t admiro :*).. y sobre el cap.. wow.. este edwarcito... fue algo insensible al hablarle asi pero creo que fue mejor aunque duela aveces escuchar las verdades creo que resulto y seguira resultando para bien las palabras de ed..aunque sabiendo que el la rego.. tuvo la delicadeza d pedirle disculpas .. aunque lo que no tiene perdonnnnn es haberla dejado asi como la puso jajaja.. esa escenita me la imagine uyyyy jaja.. buenisima esa parte...y ese final jaja.. super... y esperemosss algun díaa la version d ed.. segurisimo k ese chico tendra muxo que contar ..
besitos chungaa
Aiii!!!(Que llego...!Perdon por el retraso!) :*)
Si es que sienta TAAAAN mal q le digan a uno las verdades a la cara y TAAAN directamente...q pasa lo q pasa...
Por cierto creo q Bella aprobaria la mocion del silbidito q dice Ayyys seguro!! ;-)
Respecto a lo del punto de vista de Ed, cuando tenga q ser será y lo esperaremos con ansias..y muchas dudas!!xD
Un besazoo!!!!!!!!!!!!!!!!
Almuuuuu
Ya estoy aquí después de los exámenes!! estuve desaparecida del blog :*), lo siento! no volverá a suceder jejeje
Me voy a ir poniendo al día, y como este capi está unido con lo anterior, los comento los dos juntos.
Ayyy, esta Bella.......que se nos va a volver loca en serio :-S, aunque bueno, con ese hombre al lado cualquiera no se vuelve ;-D
Del anterior capítulo me gustó mucho la conversación que tuvieron los dos sobre lo de Jasper, me gusta que hablen, además ella necesitaba desahogarse....
Las reflexiones de Bella, como siempre, lo mejor jajajaja, es tremenda esta chica, lo de los tacones es genial ;-D
"-Habrá que cambiar eso entonces y de paso, demostrarle a cierta persona todo lo que se esta perdiendo" uy uy uy, con que van a ser cariñosos en público eh!! :-), y que jasper se está perdiendo cosas dice Edward........y después ese acercamiento....Edward Edward, que nos la vas a matar! ;-D
Y ahora vuelvo a este capítulo.... :*)
Creo que Edward es lo que necesita Bella para soltarse de una vez, porque entre otras cosas le dice las verdades que ella no ve.
Ella es normal que se enfade, porque eso fastidia muchísimo, pero si su reacción con Edward al enfadarse con él es esa......que se enfade más veces!! jejeje En serio, muchas veces viene bien enfadarse por lo que te digan, porque normalmente lo que viene después es la aceptación. A ver si nuestra pobre Bella se nos empieza centrar.....
Edward la vuelve loca, pero creo que por un lado también la va centrando poco a poco, es una mezcla, que creo que será buena no? jejejeje
Edwarcito sigue siendo un enigma....y eso de que a lo mejor no te preguntamos lo mismo dentro de unos capítulos?? :-|, prefiero hacer que no lo he leido, que lo que buscas es intrigarnos, malaaa :-}
Si no se hubiese dado cuenta de que Bella se puso tensa.......hubiese parado igual?? es por trabajo solo? ayy....habrá que esperar para saberlo :-[
Bueno, no me enrollo más, que he vuelto de mi letargo y me lio demasiado jajaja, voy a por el siguiente!!
Un besazo!
Y tú, ¿nos regalas una sonrisa?