Disturbia - Capítulo II (Marypattz)

Hola chicas!

Aquí estamos de nuevo, y venimos a traeros el segundo capítulo del nuevo fic Disturbia. Estoy segura que el Prólogo de Almu os gustó, que alucinasteis con el primer capítulo de Nuri.. pues preparadas que en este próximo capítulo de Marypattz, sabremos lo que pasó entre Edward y su mejor amigo Jacob. No me enrollo más, os dejo el capítulo:

Capítulo II – Malas decisiones y dura realidad

JACOB POV

Aquí me encontraba, abatido y triste… siendo ignorado por quien fuera mi mejor amigo, compañero y casi hermano, sintiéndome la peor persona existente en el planeta. En parte me merecía ser tratado así por él, porque la traición que cometí dos meses atrás es imperdonable, pero eso no significaba que doliera menos.

Me atormenta pensar que perdí a la única persona que estuvo siempre a mi lado y se preocupó verdaderamente por mí después de la muerte de mis padres. Es verdad que también tuve a mi lado a sus padres, Esme y Carlisle, y su hermano Emmett quienes me ayudaron mucho después del fatídico accidente, pero solamente él sabía transmitirme la fuerza necesaria para poder seguir adelante con mi vida y no darme por vencido.

Desde que cometí esa traición, no he tenido el valor suficiente para poder enfrentar a nadie. Recogí las cosas que tenía en casa de los Cullen dejándoles una nota de sincero agradecimiento por todo lo que hicieron por mí durante estos años.

Han pasado dos meses, dos interminables y agonizantes meses, en los que me encerré en el trabajo del taller para no pensar en el recuerdo de su mirada dolida e incrédula por la situación que observaba debido a que ese momento no dejaba de atormentarme… No podía seguir así, y sabiendo que tarde o temprano tendría que enfrentarle nuevamente, reuní el coraje suficiente para hablar con él cuando me enteré que volvió de su particular aislamiento. Quería arreglar las cosas para ver si el dolor disminuía aunque fuera un poco, pero cuando lo tuve cerca de mí, él lo único que hizo fue ignorarme y dejarme con la palabra en la boca pero si pensaba que iba a darme tan fácilmente por vencido es que me conocía realmente muy poco, por lo que pasados unos minutos en los que intenté calmarme, seguí el camino que él anteriormente había tomado. Lo encontré solo en el aula donde impartía sus clases disfrutando de la tranquilidad del momento, tranquilidad que a partir del día siguiente sería interrumpido por el bullicio de los alumnos, por lo que entré sin hacer ruido, y cuando me disponía a hablar…

-¿Qué estás haciendo aquí? ¿No es suficiente el daño que me has hecho que ahora vienes a regodearte en el dolor de tú mejor amigo?- noté el sarcasmo con el que pronunció las palabras “mejor amigo” y eso me dolió aun más.

-Vengo para intentar hablar y arreglar las cosas entre nosotros.

-¡No hay nada que arreglar!, ya me quedó todo muy claro cuando te encontré en mi casa, con mi novia y en mi cama- intensificaba las últimas palabras con un odio que nunca imagine ver en la persona con la que tantas cosas había compartido.

-Edward, sólo pido unos minutos para que me escuches. No eres el único que perdió un amigo con todo lo sucedido, no puedes sentirte peor de lo que yo me he sentido durante todo este tiempo…- me interrumpió con una voz que me dejó helado en mi sitio.

-¡No digas que no me he sentido peor porque te perdí a ti, con quien pasé los mejores momentos de mi juventud, y a ella, con la que compartí cuatro años de mi vida y la que iba a ser mi prometida! Perdí la confianza en la gente debido a vuestra traición y ahora desconfío hasta de mi propia sombra, por lo sucedido decepcioné a mi padre, quien siempre ha estado orgulloso de mí y a mi hermano, quien fue solo a un viaje planeado desde hace más tiempo del que te conozco a ti. Así que, ¡no me digas que tú te has sentido peor!

-Sé que las palabras no serán suficientes para enmendar todo el daño que te he hecho pero…- volvió a interrumpirme.

-Claro que no serán suficientes, todo el mundo piensa que aquí las victimas sois todos vosotros porque me fui pero ¿quieres saber por qué lo hice? Hasta con ese acto pensaba en protegeros a Tanya y a ti, ahora me doy cuenta que siempre he antepuesto el bienestar de los demás al mío, pero eso ya se acabó.

Y se fue dejándome nuevamente con la palabra en la boca y consiguiendo que me sintiera peor que antes de hablar con él…

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Ahora en la soledad de mí habitación revivo lo que me llevó a esta situación…

FLASHBACK

Llegaba tarde a casa de Edward, hacía más de media hora que tendría que estar ahí, habíamos quedado para acabar de alistar las cosas que íbamos a llevarnos a la acampada que realizaríamos con Emmett para celebrar el inicio de las vacaciones, por lo que me sorprendí cuando fue Tanya quien abrió la puerta.

Tanya, una preciosa mujer de rasgos finos como una diosa, de cabellos rojizos y con los ojos verdes más brillantes que he visto en la vida. La chica de quien estoy enamorado desde que Edward nos presentara años atrás a sabiendas que mi amor jamás sería correspondido. Ella, la novia de mi mejor amigo.

-Hola Tanya, ¿cómo estás? ¿Está Edward?

-¡Jake! Tienes suerte, aún no ha llegado, sino ahora mismo te estaría dando la bronca por llegar tarde, otra vez.

-No es culpa mía llegar tarde, son vuestros relojes que están adelantados, yo siempre soy muy puntual.

-Sí, claro que sí, siempre somos el mundo contra ti, ¿no es así?

-Jajaja, claro, sois todos contra mí. Algún día te darás cuenta.

Pasamos al interior de la vivienda y viendo que habían pasado 10 minutos desde que llegué y Edward no llegaba todavía, Tanya decidió acabar de empaquetar las cosas de Ed con mi ayuda, por lo que fuimos su habitación. Al llegar allí, como siempre me pasaba al entrar en esa pequeña estancia, algo dentro de mí se quebró, traté de disimularlo para que no lo notara pero al parecer no conseguí mi objetivo ya que acabó preguntándome qué me pasaba.

-Yo… no sé cómo decirte esto sin que nuestra amistad se vea comprometida pero…- no podía seguir callándome, si lo hacía acabaría estallando.

-Jake, ya sabes que puedes contarme lo que sea, somos amigos.- como dolía que me dijera siempre eso, “somos amigos”, una frase con un gran significado, en cambio para mí era una daga directamente dirigida a mi corazón.

-Sé que somos amigos y es lo que me duele… yo, yo…- no podía expresarlo con palabras, verla mirándome con esos ojos tan intensos y atentos me ponía más nervioso de lo que ya estaba en su presencia, por lo que acabé besándola para mostrarle con hechos lo que me ocurría.

Sentir sus dulces labios sobre los míos fue uno de las sensaciones más maravillosas que a lo largo de toda mi vida pude experimentar, pero la respuesta que obtuve de ella, que se quedó completamente quieta, fue lo que me hizo reaccionar y separarme de ella avergonzado.

-Tanya, lo siento, lamento lo ocurrido pero no podía aguantarme más… estoy enamorado de ti, sé que a quien quieres es a Edward pero no puedo evitar sentir lo que siento por ti…- le dije pasándome las manos por la cara, una manía que tengo siempre que estoy nervioso.

-Jacob, no sé qué decirte la verdad, jamás pensé que llegaras a sentir algo por mí… yo, lo siento Jake…

-No te preocupes, tú no tienes la culpa de nada, no podemos controlar los sentimientos, juro que lo evité de todas las formas posibles, opté por actuar de manera desagradable hacia ti cuando nos conocimos, fui arisco y no valoraba nada de lo que hacías pero eso sólo me llevó discusiones con Edward. Más tarde, intenté portarme lo más decente que podía contigo, pero aun así manteniendo una distancia, cuando vi…-me interrumpió furiosa poniéndome un dedo en la boca.

-¿Por eso actuabas de esa manera conmigo? De verdad que no entiendo a los hombres, con lo fácil que es expresar los sentimientos, en cambio vosotros lo que hacéis es complicar aún más las cosas. Para tu información, fui yo quien le propuso a Edward que encamináramos nuestra relación a algo más serio después de ver cómo me tratabas, después de todos los desplantes que recibí por tu parte porque cuando nos conocimos lo que teníamos él y yo era solamente sexo casual… me sentí atraída por ti cuando él nos presentó, pero claro, tú en vez de hablar conmigo de lo que pasaba o enterarte bien de cómo estaban las cosas entre tu amigo y yo optaste por el camino más fácil.- esta confesión me pilló totalmente desprevenido… ¿cómo pude ser tan idiota? ¿por mi culpa estuve sufriendo todos estos años por una mala decisión- Quiero a Edward aunque nunca he olvidado lo que llegué a sentir por ti, pero ahora ya es tarde, no podemos hacer nada... perdimos la oportunidad…

No pude soportar escuchar nada más y al ver cómo las lágrimas iban cayendo por su bello rostro, no pensé y sólo actué, acorté los pocos pasos que nos separaban y la abracé contra mí lo más fuerte posible, me aferré a ella como si se me fuera la vida en ello. Consolándola al mismo tiempo que el calor de su cuerpo, de su abrazo, iba apaciguando el revoltijo de sentimientos que tenía en mi interior, pidiéndole perdón por ser tan estúpido, arrepintiéndome de la decisión que tomé en su momento, la misma decisión que sin saberlo me alejó de ella durante todo este tiempo en el cual podríamos haber sido tan felices juntos.

Dejándonos llevar por el momento sin pensar en nada y nadie más que no fuéramos nosotros dos, dimos rienda suelta al deseo, a la lujuria y a los sentimientos que han sido reprimidos a lo largo de todo este tiempo, era tal la pasión que no oímos el ruido de la puerta al abrirse, sólo fuimos conscientes de la presencia de alguien más cuando escuchamos un ruido provocado por el choque de la cartera contra la superficie de la habitación. Ninguno de los tres supimos como hacer frente a esa situación, en la habitación reinaba un silencio realmente incómodo, lo único que se oía eran nuestras respiraciones agitadas… en el momento en que por fin la consciencia regresó a mí, un puño impactó en mi cara haciéndome tambalear y caer al suelo. Cuando me recuperé, lo primero que vi fue a Tanya con las piernas recogidas cerca del pecho y llorando desconsoladamente, me informó que Edward salió de la casa tal y como llegó, no hubo gritos ni reclamaciones por su parte, sólo silencio. No salí detrás de él sino que me quedé allí, en mi sitio, maldiciendo la mala suerte que parecía acompañarme siempre y también por miedo a que acabáramos peleando, perdiendo el control y haciendo cosas que en el futuro no haría más que daño.

FIN DEL FLASHBACK

Después de lo que pasó, tanto Tanya como yo decidimos que sería mejor no tomar una decisión en lo que a nosotros se refería hasta haber hablado las cosas con Edward. Hemos mantenido la comunicación pero no es lo mismo poder hablar con ella cara a cara que a través de un teléfono móvil… no hemos vuelto a vernos desde ese mismo día para no ponerle más leña al fuego, pero cada día se me hacía más difícil estar lejos de ella. Estar sin su compañía en los momentos de mayor soledad es una gran tortura, un gran sacrificio que estaría dispuesto a aguantar sin quejas si supiera que el futuro me lo compensaría pero el futuro es incierto y nadie sabe lo que pasará…

Hay gente que piensa que el hecho que un hombre llore y exprese sus sentimientos lo hace menos hombre de lo que en realidad es, pero a mí me da igual, ya que esa es la única manera que tengo de poder desahogarme… Lo único que tengo claro y de lo que estoy completamente seguro en estos momentos es que debido a una mala decisión en el pasado estoy solo, y esa es la dura realidad a la que tengo que hacer frente diariamente.

Pues esto es todo chicas, ¿qué os ha parecido? Ya os digo yo que veo que más de una va a sacar de esto una afición y sino al tiempo! Pues nada, ahora esperamos al miércoles al nuevo capítulo de Disturbia.

14/07/2010 Almu

16/07/2010 Nuri

19/07/2010 Mary

21/07/2010 Alba

23

/07/2010 Karla

26/07/2010 May

28/07/2010 Adry

30/07/2010 Andrea.Nube

02/08/2010 Ayyys

0

4/08/2010 Grisel

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6/08/2010 ------

09/08/2010 Milu

11/08/2010 Kris

Nos leemos!

Publicado por Anónimo en 17:20